¡Tenemos que armar las valijas...!


Se fue a vivir a un pensionado de estudiantes,/pasando a integrar/la gran legión de canarios en la capital.
Larbanois & Carrero

En este momento de nuestras vidas, y sobre todo a esta altura del año, pensamos y deseamos un montón de cosas, como terminar el liceo ya! Que empiece el veranito, salir de vacaciones, etc. 
Pero este año es particular, estamos terminando  nuestra etapa liceal, y pensamos en todas las cosas anteriores, pero también  intentamos planear  y organizar lo que será de nosotros el año que viene, y con ello que vamos a hacer en el estudio,  por qué carrera me decido, si viajamos, si nos quedamos en el  hogar, si alquilamos alguna piecita, que como, que no como, como hago para estudiar, ver amigos, novio, todo!.

Es claro, las cosas cambian, en Montevideo todo es distinto, más grande, tal vez más difícil, etc.

Son esas cosas y muchas más las que podemos llegar a escuchas de amigos, hermanos, en definitiva de todo el mundo, de como es, irse a estudiar a Montevideo o a donde sea.

El hecho es  de que después de tantos años de estudiar en un lugar como San José, de hacer las mismas cosas, con casi las mismas personas, de conocernos entre todos, de salir corriendo del liceo, de vez en cuando, por que los profesores o las materias son muy pesadas o porque simplemente el día era demasiado lindo como para estar entre cuatro paredes y era mejor pedir después el cuaderno y así poder disfrutar del parque o la plaza(por cierto las únicas atracciones que se nos han pasado por la cabeza al correr de estos años),tenemos que armar las valijas, llenarlas con un poco de ropa, muchos sueños.

Es allí donde empezamos a tener una mezcla de diferentes sentimientos, como ansias, incertidumbres, alegrías, intrigas, donde se nos mezclan las ganas de probar experiencias nuevas pero a la vez no extrañar todas las cosas que tenemos en nuestro pueblo y que se nos hacen tan nuestras.

Es parte de la vida, es cierto, hay que crecer, ser independientes y forjarse una vida más allá de nuestros padres, también es cierto que asusta y mucho. Cada vez que pensás ¿qué voy a hacer?, ¿cuándo voy a ver a mis amigos?, ¿ y si la plata no alcanza?, se juntan muchas sensaciones y decís “mejor me quedo”, solo porque acá es lindo, estás acostumbrado, conoces más gente, pero no podes estudiar esa carrera que tanto te apasiona y que sabés que aunque capaz no te de mucha plata, te va a hacer feliz, y que al fin y al cabo es solo por eso que te vas, para hacer algo que realmente te gusta y que sabes que va a hacer de tu vida algo realmente bueno.

Si lo decimos de esa manera, parece estar re difícil y que nadie aguantaría, pero creemos y vemos que no es tan así y que si otros han podido nosotros también, solo es acostumbrarse, adaptarse a hacer cosas diferentes, y aceptar con alegría que estamos creciendo y que cada vez vamos a tener mayores obligaciones, pero también mayores sueños, y depende  puramente de nosotros cumplirlos. 

Y bueno, la vida es así, todos cambiamos y seguimos con nuestro camino, pero siempre teniendo en cuenta que aunque cueste un poco, siempre vamos a acordarnos de los días de liceo donde nos peleábamos con alguna que otra compañera, y donde la pasamos muy bien porque siempre había alguien con quien reírse o de quien reírse.

Hoy el liceo es casi un martirio porque deseamos que ya se termine, pero seguro en un par de años vamos a querer volver a ver a todos aquellos que nos hicieron de este camino algo muy bueno. 

Victoria Britos y Melisa Martinez

6toSH 12


0 comentarios:

Publicar un comentario